Las universidades jesuitas saludaron la publicación y reconocieron los aportes del reporte sobre violaciones a los derechos humanos cometidos por el gobierno entre 1965 y 1990.
El pronunciamiento apunta que hubo “falta de respaldo institucional”, pero aun así reconoce que se hace una contribución importante para conocer la violencia de Estado.
El informe reconoce que en esas décadas el Estado instrumentó una represión sistemática contra las diversas disidencias que, según las primera cifras reveladas, dejó a su paso 8,594 personas víctimas de graves violaciones, 123,034 personas desplazadas y un sinfín de acciones clasistas y racistas que hasta el día de hoy permean en la manera en que nos relacionamos como sociedad.
Las escuelas jesuitas piden acatar las recomendaciones del documento, entre las que destacan que las violaciones sean reconocidas oficialmente y que se abran los archivos para conocer toda la verdad.
Más de 8 mil víctimas durante la Guerra Sucia: Informe ‘Fue el Estado: 1965-1990’
El Mecanismo de Esclarecimiento Histórico (MEH) presentó este viernes el informe ‘Fue el Estado: 1965-1990’ sobre la represión del gobierno mexicano durante dicho periodo de la ‘Guerra sucia’, y denunció que las Fuerzas Armadas y de seguridad continúan ocultando información crucial, con el respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En contraste con la cifra oficial de mil 500 víctimas de la ‘Guerra sucia’, periodo de represión del gobierno contra disidentes, el MEH documentó 8 mil 594 víctimas de 11 violaciones graves a los derechos humanos entre 1965 y 1990, de las que el Estado fue responsable.
[embed]https://www.youtube.com/watch?v=vku17q1UtUY[/embed]
Carlos Pérez Ricart, comisionado del referido mecanismo, dijo en la presentación del reporte que muchas personas sufrieron múltiples violaciones aunque sean menores, lo que eleva el número de víctimas a 11 mil 743, pero destacó que son solo los casos con evidencia.
“Ni siquiera pudiendo investigar durante 30 años habríamos podido tener un número que se acercara al número real de víctimas”, apuntó, y agregó que esta cifra no incluye las más de 123.000 víctimas de desplazamiento forzado de las que hay registro.
Las universidades jesuitas saludaron la publicación y reconocieron los aportes del reporte sobre violaciones a los derechos humanos cometidos por el gobierno entre 1965 y 1990.
El pronunciamiento apunta que hubo “falta de respaldo institucional”, pero aun así reconoce que se hace una contribución importante para conocer la violencia de Estado.
El informe reconoce que en esas décadas el Estado instrumentó una represión sistemática contra las diversas disidencias que, según las primera cifras reveladas, dejó a su paso 8,594 personas víctimas de graves violaciones, 123,034 personas desplazadas y un sinfín de acciones clasistas y racistas que hasta el día de hoy permean en la manera en que nos relacionamos como sociedad.
Las escuelas jesuitas piden acatar las recomendaciones del documento, entre las que destacan que las violaciones sean reconocidas oficialmente y que se abran los archivos para conocer toda la verdad.
Más de 8 mil víctimas durante la Guerra Sucia: Informe ‘Fue el Estado: 1965-1990’
El Mecanismo de Esclarecimiento Histórico (MEH) presentó este viernes el informe ‘Fue el Estado: 1965-1990’ sobre la represión del gobierno mexicano durante dicho periodo de la ‘Guerra sucia’, y denunció que las Fuerzas Armadas y de seguridad continúan ocultando información crucial, con el respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En contraste con la cifra oficial de mil 500 víctimas de la ‘Guerra sucia’, periodo de represión del gobierno contra disidentes, el MEH documentó 8 mil 594 víctimas de 11 violaciones graves a los derechos humanos entre 1965 y 1990, de las que el Estado fue responsable.
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Carlos Pérez Ricart, comisionado del referido mecanismo, dijo en la presentación del reporte que muchas personas sufrieron múltiples violaciones aunque sean menores, lo que eleva el número de víctimas a 11 mil 743, pero destacó que son solo los casos con evidencia.
“Ni siquiera pudiendo investigar durante 30 años habríamos podido tener un número que se acercara al número real de víctimas”, apuntó, y agregó que esta cifra no incluye las más de 123.000 víctimas de desplazamiento forzado de las que hay registro.